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jueves, 4 de febrero de 2016

El Quimbo: un desastre anunciado

Artículo publicado en la Edición impresa 113 (enero - febrero 2016) de Periferia Prensa Alternativa

Foto: Asoquimbo


Por Miller Armín Dussán Calderón*

El Gobierno Colombiano, a través del Consejo Nacional de Política Económica y Social -Conpes- del 2008, definió la construcción de varias Hidroeléctricas en diferentes lugares del país y al mismo tiempo determinó el sistema de financiación.  Autorizó por tiempo indefinido a la Empresa colombo española Emgesa, (subsidiaria de Endesa y de propiedad mayoritaria de la italiana ENEL) para que con sus recursos propios y para su único y exclusivo beneficio, construyera la central hidroeléctrica El Quimbo enmarcada por el Plan 2019 o Visión Colombia II Centenario, cuyas bases son la confianza inversionista y la seguridad democrática.

El proyecto está localizado en el sitio geográfico encañonado denominado "El Quimbo", a 1.300 metros, aguas arriba, de la desembocadura del Río Páez sobre el Río Magdalena, al sur del embalse de Betania, en jurisdicción de los Municipios de Gigante, Garzón, El Agrado y Altamira del Departamento del Huila, Colombia. Inundó 8.586 hectáreas de las cuales el 95% hacen parte de la Reserva Forestal Protectora de la Amazonía y del Macizo Colombiano, sin la restitución de la actividad productiva (5.300 has), la mayoría vinculada a 8 empresas comunitarias en plena producción agropecuaria, (cacao, sorgo, maíz, arroz) por un valor de $33.000.000.000 (US 18.5 millones) anuales. Se destruyeron 842 hectáreas de bosque ripario y tropical seco y las epifitas, poblaciones de peces que son básicos para la seguridad alimentaria, 103 especies de aves, 13 especies de reptiles y tres de mamíferos en severo peligro: la pacaraná, el mono nocturno de manos grises y la nutria neotropical. Se afectó el patrimonio nacional, calculado en el 2012 por la Contraloría en 120 millones de dólares. Se han inscrito 33.000 víctimas de las cuales 3.000 han sido desplazadas y Emgesa solo reconoció compensaciones mínimas a 3.000.

La obra es la primera que se vende bajo el esquema de subasta por cargo de confiabilidad, que significa que a Emgesa se le garantiza “un ingreso fijo independiente de su participación diaria en el mercado mayorista asignado por un período de 20 años, reduciendo así el riesgo de su inversión”, pago que se suma a la factura de los usuarios.

La Asociación de Afectados por el Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo -Asoquimbo- ha demostrado que el problema se originó en el desconocimiento por parte del Gobierno del presidente Álvaro Uribe del Auto No. 517 de 31 de julio de 1997 mediante el cual el Ministerio de Ambiente declaró  no viable el Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo, sin embargo,  en el 2007 subastó el Proyecto a Emgesa y declaró mediante Auto No. 515 del 22 de febrero de 2008 que El Quimbo “No requería de la presentación de Diagnóstico Ambiental de Alternativas (DAA)” y otorgó Licencia Ambiental Mediante Resolución 0899 del 15 de mayo de 2009.

Seis años después de expedida la licencia, los hechos demuestran que los daños económicos, sociales, ambientales y culturales son irreparables como se advirtió desde un comienzo cuando se sustentó que el proyecto era inviable fundamentalmente por dos razones: La primera, porque no existía justificación técnica para la desproporción entre el área de inundación y la poca generación de electricidad. El proyecto El Quimbo necesita 20 hectáreas de embalse para instalar una unidad de potencia de energía (Gigawatio), mientras una hidroeléctrica en cualquier otro lugar de Colombia apenas necesitaría dos hectáreas. La segunda, por la afectación estructural del área productiva, no es conveniente que se inunden las mejores tierras con vocación agrícola de la región y sería imposible restituir la actividad productiva en la zona.

Lo que hoy ocurre con las afectaciones ambientales  que reconocen  expertos, había sido advertido desde el 2013 por el    científico Kashyapa A. S. Yapa (Ph.D. en Ing. Civil – UC Berkeley) en su Informe titulado ¿ES “EL QUIMBO” TECNICAMENTE VIABLE? en cuya parte introductoria señala que “Hemos analizado en detalle los documentos públicamente disponibles sobre el Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo que sigue construyendo EMGESA, y encontramos varias falencias graves en el documento que sirvió de base para la aprobación de la licencia ambiental para su construcción, la evaluación de impacto ambiental (EIA). También observamos que EMGESA ha hecho cambios sustanciales a su propuesta de manejo del embalse El Quimbo, después de recibir la licencia, sin ningún pronunciamiento de las autoridades pertinentes”. Más adelante señala que “La mayor preocupación ambiental del proyecto El Quimbo es justamente eso: la falta de oxígeno y sus bajas temperaturas en el fondo del embalse no solamente destruiría su vida acuática, sino también la del río abajo y en La CHB. Y el EIA desecha estas preocupaciones, aplicando dudosamente datos de un modelo, incapaz de modelar situaciones reales”. El estudio fue entregado oportunamente a la ANLA y a la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca.

El estudio contratado por EMGESA a petición de la ANLA, en el 2014, sobre Modelo Eco-hidrológico integrado del complejo Quimbo-Rio Magdalena-Betania realizado por el Grupo de Limnología Amazónica de la Universidad Nacional de Colombia coordinado por Santiago Duque, con el fin de evaluar los posibles impactos ambientales que generará el embalse de El Quimbo, una vez se inicie  el proceso de llenado, señala en una de sus conclusiones que “las condiciones de aportes de nutrientes de la cuenca del Magdalena y la descomposición del área a inundar tendrán niveles de eutrofización en las aguas del futuro embalse de El Quimbo” por lo que dentro de las recomendaciones que enviaron en julio del 2015 a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) se recomienda que “la biomasa debe ser retirada en su totalidad del vaso del embalse para minimizar los impactos ambientales adversos y evitar la degradación en la calidad del agua y el río Magdalena”.

Emgesa, con el aval de la ANLA, procedió al llenado del embalse sin tener en cuenta las recomendaciones anteriores y cuando aún no había concluido el estudio. Posteriormente, el Gobierno decretó la generación de energía por encima de orden judicial que había impuesto medida cautelar de suspensión de la misma mientras se retiraba la biomasa, orden que tumbó la Corte Constitucional.

El gobierno logró  mediante Acción de Tutela que el Juzgado Tercero Penal del Circuito Especializado con Funciones de Conocimiento Neiva, resolviera “Autorizar a EMGESA, como medida transitoria, y hasta que el Tribunal Contencioso Administrativo del Huila decida de fondo sobre el levantamiento o no de la medida cautelar decretada, la generación inmediata de energía en el Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo”, decisión que ha sido cuestionada por expertos y comunidades afectadas al considerar que obedeció a las presiones gubernamentales y no a criterios técnicos.

Asoquimbo solicitó mediante Memorial al Tribunal Administrativo se ratifique la medida cautelar de prohibición de generación de energía por parte de Emgesa, se ordene desocupar el embalse de El Quimbo para que se haga efectivo el retiro del material forestal y la biomasa garantizando el flujo natural del Río Magdalena y se convoque a un grupo independiente e interdisciplinario de expertos con el propósito de evaluar los daños económicos, sociales, ambientales y culturales ya causados y los que se generarían de continuar con la generación de energía y decidir cuidadosamente con fundamento en los estudios técnicos, ponderando beneficios y costos ambientales y regionales y respetando la ley y los derechos de las comunidades.
  
ContextoLa biomasa o material orgánico ha ocasionado un proceso de eutrofización que consiste en la acumulación de residuos que al descomponerse generan olores nauseabundos, así como proliferación de vegetación y organismos que agotan el oxigeno del agua. Tras la reactivación de la generación de energía el pasado domingo 11 de enero, la comunidad ha denunciado la reaparición de estos olores, y una gran mortandad de peces. 




*Representante legal de Asoquimbo, Profesor Universidad Surcolombiana.

jueves, 28 de enero de 2016

Comunidades del norte del Tolima rechazan microcentrales en el río Recio

Artículo publicado en la Edición impresa 113 (enero - febrero 2016) de Periferia Prensa Alternativa

Por Equipo Periferia Tolima


Fotografía: Periferia


En el norte del departamento del Tolima se encuentra un caudaloso río que nace de las entrañas del volcán nevado del Ruíz. Testigo de los impactos negativos de la producción cafetera, de la minería, del mal manejo de su cauce y sustancialmente de los efectos del cambio climático, este río ha sobrevivido con imponente fortaleza y ha sobrepasado las torrentosas palizadas de la codicia y la irresponsabilidad de unos poco 


Se llama río Recio. El nombre indica mucho de su pasión, de su fuerza, de sus imponentes rápidos que bajan buscando tranquilidad.  En la parte alta se mezcla con el río la Yuca que abastece de agua al municipio de Santa Isabel  y en la parte baja da sustento a las familias del plan del Tolima. Su caudal se usa en gran proporción –en la parte baja- para el riego de cultivos de arroz y sorgo en municipios como Lérida y Venadillo. Las extensiones de los cultivos de arroz son de aproximadamente 14 mil hectáreas de arroz de las cuales en la actualidad solo están produciendo 2 mil quinientas, la causa principal es que no hay  agua; así lo manifestaron los usuarios y socios de Asorrecio.

Sin embargo, este patrimonio natural de los tolimenses y los colombianos es amenazado por proyectos que pretenden despojarlo de sus entrañas y convertirlo en máquinas para la producción privada de energía. Sobre su cuenca, que no sobrepasa los 109  km desde la parte alta hasta la parte baja (o plan del norte del Tolima), se pretende construir siete “pequeñas” centrales eléctricas.  Uno de los responsables de este proyecto es el señor Hernan Pulido Arroyave, director  de la empresa Desarrollo y Fomento Hidroeléctrico DFH S.A.S, empresa  ejecutora de las primeras fases del proyecto “Aprovechamiento Hidroeléctrico del Rio Recio Los Panches”.

Cada “pequeña” central, pretende generar entre 12 y 19  MW de potencia eléctrica, esto significa que requiere cerca de 6 km para su construcción, en total más de 42 km. Si calculamos el área del cauce del río, frente al número de proyectos (7), prácticamente se estaría concesionando la mitad de la cuenca para el montaje de este tipo de emprendimientos energéticos.

Frente a esto la comunidad del Norte del Tolima, en municipios como Lérida, Venadillo, Líbano, Murillo y Santa Isabel, en donde también se impulsan proyectos mineros, ha mostrado su preocupación por la intención de desarrollar este tipo de iniciativas. En diversos escenarios, algunos convocados por la empresa que dice abanderar estos proyectos, la comunidad ha manifestado su descontento y preocupación. Por eso se han llevado a cabo varios foros, como el de Convenio, un corregimiento del municipio del Líbano, en donde la Asamblea Popular de la comunidad rechazó la amenaza extractivista, proponiendo la creación de comités veredales para la defensa del territorio y veedurías ante el funcionamiento de este tipo de empresas, así como la iniciativa de una posible consulta popular que logre sacar del municipio proyectos como la mina Gran Porvenir.

En el mes de noviembre del año 2015 en la vereda La Aurora del municipio del Líbano, se reunieron alrededor de 100 delegados y habitantes cercanos, entre los que se encontraban presidentes de Juntas de Acción Comunal, líderes de reservas ambientales, la Asociación Agroambiental Camilo Rodríguez (ASACOL), el Comité Ambiental del Líbano, el Congreso de los Pueblos, el Movimiento Ríos Vivos, expresiones artísticas de la Universidad del Tolima, entre otras, para conocer los impactos reales y experiencias como la vivida por  las comunidades afectadas en Hidroituango - Antioquia.  Estas motivaron la organización de un plan de confrontación a las empresas que pretenden desarrollar estos proyectos en el norte del Tolima. El diseño ha estado guiado por tres ejes que marcaron el desarrollo del Foro, propuestos por Ríos Vivos: Organización, formación y acción para la defensa de nuestros ríos.



En la actualidad las comunidades vienen articulando su trabajo con este importante tema de resistencia y han sumado más iniciativas. Es el caso de Asorrecio, que compró en el cañón del río Recio algunas fincas para conservación del cauce; aun así, en uno de estos terrenos ya se encuentra ubicado el proyecto PCH7 parte baja. Asorrecio está dispuesta a solicitar la franja del río en reserva para evitar la construcción de la “pequeña” central, también a juntarse con las administraciones locales y habitantes del plan de Tolima para participar de los foros y espacios de formación y generar acciones que impidan la construcción de estos proyectos que atentan contra la vida, la permanencia, la cultura y las actividades económicas propias de esta región del Tolima.

En el desarrollo de la dinámica se tiene previsto un Segundo Foro Por La Defensa del río Recio en el mes de febrero en la vereda la Trina Municipio del Líbano, la temática estará centrada en continuar conociendo experiencias de resistencia por la defensa de los ríos, afectaciones de la construcción de hidroeléctricas, figuras de zonas de reserva de sociedad civil,  entre otros que permitirán formar a los campesinos para que estas empresas y multinacionales no los sigan engañando y despojando de su territorio.  Los proyectos hidroeléctricos, no están orientados a brindar electricidad a las comunidades aledañas, en cambio están planificados dentro del modelo extractivista que se plantea desde el gobierno nacional para proveer energía a las empresas constructoras y a las mineras. Las organizaciones sociales consideran que permitir estos proyectos es estar a favor de la minería y contradecir la vocación agrícola que caracteriza esta rica zona del norte del Tolima.

Bajo estas consideraciones es que se alerta sobre nuevos proyectos que pretenden poner en jaque el futuro del pueblo Colombiano. Sin lugar a dudas el llamado es a la unidad, la movilización y la organización para no permitir que este tipo de proyectos logren su propósito de barbarie, contaminación y despojo.




miércoles, 27 de enero de 2016

Un plan no tan Pazcífico

Artículo publicado en la Edición impresa 113 (enero - febrero 2016) de Periferia Prensa Alternativa

Por Comunidad Sirirí*

¿Qué es el “Plan Pazcífico”?

El “Plan Pazcífico” (PP) o Plan de integración y desarrollo humano sostenible del Pacífico colombiano, fue acordado por las gobernaciones de los departamentos del Chocó, Valle del Cauca, Cauca y Nariño con el propósito principal de integrar el Pacífico colombiano al sistema económico mundial convirtiendo la macrocuenca pacífica en un gran corredor logístico para el flujo de mercancías de una importante franja del norte de Suramérica. Al mismo tiempo, el PP crea todas las condiciones necesarias para lograr el saqueo de la exuberante riqueza mineral, maderera, hidrográfica y biológica de la casi inexplorada región pacífica colombiana. 
VER 'PLAN PAZCÍFICO' COMPLETO AQUÍ 

Importancia geoestratégica del Pacífico colombiano en el mapa del comercio mundial

El pasado mes de octubre concluyeron exitosamente las negociaciones del Tratado de Libre Comercio con el Pacífico (TPP, por sus siglas en inglés). De este tratado tomaron parte Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, EEUU y Vietnam, países cuyas  economías concentran el 40% del PIB mundial.

El pasado 14 de enero de 2016, en su discurso sobre el estado de la unión ante el congreso de su país, Barak Obama afirmó sobre el TPP: “...forjamos una Alianza Transpacífica para abrir mercados, proteger a los trabajadores y al medio ambiente, y avanzar el liderazgo de Estados Unidos en Asia. Reduce 18.000 impuestos en productos hechos en Estados Unidos y apoya más buenos trabajos. Con TPP, China no determina las reglas en esa región, sino nosotros. ¿Quieren demostrar nuestra fuerza en este siglo? Hagan que se apruebe este acuerdo”.

Figura 1: Eje Andino 

Si a la docena de países firmantes del TPP se les suma China, India y Corea del Sur, en valores agregados, se puede afirmar que por lo menos la mitad del comercio mundial se trafica por el Pacífico, por ello la puja por la hegemonía mundial, pasa por el Pacífico.

El Pacífico colombiano “Es la única región interoceánica del país que conecta a América Central con América del Sur, la única transamazónica que une el Amazonas con el Pacífico, y es el potencial eje articulador de Colombia con la Cuenca del Pacífico y con la del Atlántico a través del Canal de Panamá, que cobrará mayor importancia a partir de su ampliación. También constituye la salida natural de Venezuela y Brasil al Océano Pacífico y la que enlaza a Colombia con el Ecuador y resto de Sur América.” (Plan Pazcífico pp. 19).


Condiciones favorables para el PP en la región suramericana

En el concierto Suramericano, Colombia, como ningún otro país del continente, se ha caracterizado por su fuerte y duradera subordinación estratégica a los EE.UU. durante ya casi un siglo, como lo afirma Renán Vega Cantor en el informe de la Comisión Histórica del Conflicto y sus Víctimas. Subordinación que para los intereses del país del norte en la cuenca pacífica se materializa en la gestación de la Alianza Pacífico, alianza en la que Colombia junto a Perú, Chile y México agenciaron la llamada restauración conservadora en América Latina; apuesta hegemónica que en el último año materializó importantes reveces para el bloque alternativo nuestroamericano.

Es importante mencionar que la Iniciativa para la Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA), fue incorporada por la UNASUR como su “foro técnico para temas relacionados con la planificación de la integración física regional suramericana” y quedó adscrita al Consejo Suramericano de Infraestructura y Planeamiento (COSIPLAN).

Con el IIRSA “recargado” y la restauración conservadora galopante en Nuestramérica, el PP encuentra condiciones favorables para su aplicación.

Figura 2: Eje amazónico
Como se muestra en los mapas de proyección de infraestructura del IIRSA para el norte de Suramérica, Eje Andino (figura 1) y Eje Amazónico (figura 2), se pone sobre la mesa la importancia del Pacífico colombiano para el saqueo de la Amazonía (acaso el último pulmón planetario), y la posibilidad de que la hermana república Bolivariana de Venezuela y la región de la Orinoquía colombiana se articulen al circuito comercial más determinante del siglo XXI. 
Como lo desarrollaremos a lo largo de una saga de 12 publicaciones  en el Periódico Periferia a lo largo del presente año, iremos mostrando la total correspondencia del PP con apuestas más globales de la pequeña élite que mal gobierna nuestro planeta.


Visión del PP: el largo plazo

"En el año 2038 el Pacífico colombiano es una región pluriétnica, pluricultural, biodiversa, educada, equitativa, pacífica y próspera, fundamentada en la dignidad humana; cuenta con una moderna y diversa plataforma que la conecta e integra como región y a Colombia con el resto del mundo, como región interoceánica, transamazónica, y de “buen vivir”; dispone de capacidades propias que le han permitido desarrollar programas y proyectos sostenibles, de impacto regional, nacional e internacional” (Plan Pazcífico, pp. 37).

Por la destinación de los rubros presupuestales, algo en lo que se irá ahondando, se considera que los verdaderos propósitos de la visión del PP son los que se resaltan deliberadamente con negrillas que no hacen parte del texto original.

Aunque se adorna la Visión del PP con discurso democrático, esta como todas las apuestas del capital transnacional, se fundamenta en intereses egoístas, se gesta por tecnócratas fanáticos de ideología neoliberal, se lleva a práctica por camarillas de rufianes que han hecho del Estado su botín y se garantiza en el territorio con fuerzas represivas.

Como se dijo anteriormente, la gestación del PP data desde antes del año 2010 y hace parte de un plan transnacional cuyo propósito central es permitir la expansión de los mercados y la incorporación de regiones estratégicas del norte de Suramérica al circuito comercial mundial en un horizonte temporal de tres décadas.

Objetivos del PP en el mediano plazo:

Para 2014-2018 fueron proyectados una serie de megaproyectos por un costo de 23 billones cuyos principales rubros están destinados a la ampliación de la infraestructura logística de la región en pos de ampliar los puertos marítimos y garantizar su conectividad con las regiones Central, Atlántica, Orinoquía, Amazonía y fronteriza. Para lograr esto, se debe romper toda la región pacífica con carreteras, vías férreas, acuapistas e hidroeléctricas en diferentes puntos nodales de todo el territorio nacional cuya trayectoria es el litoral Pacífico.

En el Plan Nacional de Desarrollo, artículo 178, quedó definido un patrimonio autónomo llamado Fondo para el desarrollo del Plan Todos Somos PAZcífico, fondo que el pasado mes de octubre recibió 400 millones de dólares provenientes de préstamos del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo.  Una importante parte de estos recursos ya están siendo ejecutados en 50 de los 250 proyectos definidos para el primer decenio.


* La Comunidad Sirirí hace parte de Dibujando Caminos de Paz que es uno de los tejidos del Congreso de los Pueblos en el  Valle del Cauca. El objetivo de éste esfuerzo investigativo es aportar a la construcción de una postura política propia de los pueblos del Suroccidente colombiano frente al denominado "Plan Marshall para el Pacífico colombiano".


lunes, 25 de enero de 2016

¡Así se moldea la huelga!

Artículo publicado en la Edición impresa 113 (enero - febrero 2016) de Periferia Prensa Alternativa

Por Equipo Periferia

En las afueras de Medellín, al sur, sobre la antigua vía que va al municipio de Caldas, en donde hace tres o cuatro décadas se levantaba una importante zona industrial, se encuentran Moldes Medellín y la Andes Cast Metals Foundry que pertenecen al grupo empresarial norteamericano Ross Mould. En la entrada principal se ven las pancartas que alientan la huelga de los trabajadores de la industria del vidrio afiliados a Sintravidricol; también se pueden ver los sellos que el Ministerio de Trabajo colocó en las puertas de acceso.

Bajo la carpa ubicada en la entrada principal encontramos más de diez obreros de la empresa, todos jóvenes. La carpa no solamente los cubre de la intemperie, es también la despensa, el espacio de educación, de solidaridad y de fortalecimiento moral.

Pablo Emilio Castaño, presidente nacional de Sintravidricol y empleado de Peldar desde hace veinte años, quien además asesora el proceso de negociación de sus compañeros, nos cuenta que Peldar fue creada a mediados de los años 40 por dos hermanos: Pedro Luis y Darío Restrepo Botero, dos antioqueños que compraron una pequeña fábrica de vidrio y aprovecharon la coyuntura que la segunda guerra mundial causó a las importaciones de este producto tan necesario.

“En Colombia es abundante el material para la producción de vidrio, y lo único que viene de afuera son los químicos y tintes que son componentes menores para crear todo tipo de vidrio desde el plano hasta los envases y vajillas. En esas condiciones favorables fue que Peldar creció como espuma y llegó a tener más de cuatro mil trabajadores en los años 70, gracias a los cuales, se convirtió en la empresa líder de ese sector”, complementa Mauricio, un joven líder sindical.

El negocio bien y los trabajadores mal

Al principio, Peldar concentraba todos los procesos de producción del vidrio, o sea la parte metalmecánica, el diseño, la fabricación de moldes, la fundición del hierro, entre otros,  y recuerda Pablo, “el trabajo era muy artesanal y los trabajadores carecían de todo tipo de protección industrial y de beneficios laborales, lo único que crecía era la recarga de trabajo; además no tenían transporte, alimentación ni descanso compensatorio. Por eso, con el fin de exigir condiciones justas de tipo laboral y social, los trabajadores se organizaron y en 1955 fundaron su sindicato  Sintravidricol.

Durante esta época Peldar se consolidó. Los grupos más poderosos como Ardila Lülle y Santo Domingo, lo vieron como una posibilidad de mayores ingresos, obviamente porque Peldar tenía lo que esas empresas necesitaban, o sea envases de vidrio y botellas. Por eso los unos, Ardila Lülle, compraron parte de la empresa y los otros, Bavaria, hicieron grandes negocios estratégicos con Peldar; otro grupo de empresarios también compraron acciones y la empresa se volvió un gran emporio, con plantas de producción en Cogua, Cundinamarca y en Envigado, Antioquia”.

Según cuentan los líderes sindicales, fue tanto el crecimiento de Peldar que en 1985 la Owens Illinois, la transnacional más poderosa de esa industria en el mundo, puso sus ojos y su dinero sobre la empresa colombiana y compró la mayoría de sus acciones. Con la inversión extranjera llegaron los cambios, transformaron las relaciones laborales, trajeron tecnología y redujeron la mano de obra en casi un 30%, de 3.000 trabajadores quedaron poco más de 2.000. En la negociación convencional con la nueva empresa se creó, de manera discriminatoria, una escala salarial paralela a la que tenían; esta se aplicaría a los nuevos. Los trabajadores y el Sindicato sufrieron un duro revés económico, político y social. Las transformaciones políticas al interior del Sindicato y de los trabajadores fueron evidentes con la nueva cultura laboral de competencia y divisionismo que trajo la transnacional. El neoliberalismo obligó al Sindicato a fortalecerse y pasar de sindicato de empresa a sindicato de industria para soportar la embestida. En los años 90 llegó la reforma laboral, la pensional y los fondos privados de cesantías; el chantaje principalmente fue la herramienta que utilizó la empresa para aplicar las nuevas condiciones a casi la totalidad de los trabajadores.

El segundo gran revés, comenta Pablo, se da en el año 1999, cuando la nueva empresa, aduciendo crisis económica, dijo que iba a sacar 250 trabajadores de la sección metalmecánica, y el Sindicato y los empleados le creyeron, y con el fin de evitar esta masacre laboral donaron 16 días de su trabajo. Meses más tarde, en agosto, la nueva Peldar vendió la sección talleres de mecánica al grupo Ross Mould Internacional; la nueva dueña extranjera, se llevó  toda el área metalmecánica y de fundición que funcionaba en Envigado y la trasladó junto con sus 130 trabajadores convencionados al municipio de Sabaneta, creando a su vez, lo que hoy se llama Moldes Medellín, es decir nace una nueva empresa, pero ahora de propiedad de Ross Mould, otro poderoso grupo norteamericano. Para completar, en el año 2000, Peldar compró la vidriera Fenicia y cerró uno de los tres hornos que traía esa empresa, generando más desempleo.

En resumen, Peldar se ganó los 16 días de todos los trabajadores, amplió su poder en el mercado comprando a Fenicia, su principal competidora; además se deshizo del área metalmecánica y se ganó otra buena cantidad de dinero, quedando con una empresa dedicada solo a la producción de vidrio. Los únicos que perdieron fueron los trabajadores.

La huelga: derechos para todos

Con este nuevo marco laboral y político, los trabajadores de Moldes Medellín, la mayoría jóvenes y sin experiencia sindical, se vieron abocados a enfrentar las políticas de la Ross Mould. Entre el 2001 y el 2015 se llevaron a cabo cuatro negociaciones, asesoradas desde luego por los directivos sindicales de mayor experiencia de Sintravidricol. Sin embargo los resultados fueron negativos para los trabajadores. En el 2001 se firmó una convención entre Moldes Medellín y Sintravidricol, a cinco años, que le permitió a Ross satelizar la producción y dividir la fuerza de los trabajadores. En el 2002, el grupo Ross divide en dos a Moldes Medellín, creando dentro de la misma planta otra empresa exclusiva para el área de fundición, la Ross and Cast Industriens; según el líder sindical Andrés Ocampo, “para que no se contaminaran con los sindicalizados”, en el 2003, la Ross, se llevó unas máquinas para el municipio de la Estrella y creó dentro de la misma planta, otras tres empresas, la Andes Cast Metals Foundry (fundición); la Andes International Toolings (herramientas) y la Ross International Design and Machine (diseño y máquinas). Todos los trabajadores de estas nuevas empresas de La Estrella fueron contratados cero kilómetros, con salario mínimo. Además, de manera ilegal, la empresa les desconoció los derechos adquiridos en la convención colectiva y les aplicó un pacto colectivo a los nuevos.

De una gran empresa como Peldar que manejaba todos los procesos de la industria del vidrio con más de tres mil trabajadores, ahora existían seis con menos de la mitad de trabajadores y con  condiciones laborales precarias. Sin embargo el malestar creció por la discriminación entre antiguos y nuevos y entre sindicalizados y no sindicalizados, y hacia el 2007 los de La Estrella se sindicalizaron y constituyeron la seccional en ese municipio.

Vino entonces el conflicto laboral del 2007 y según Sintravidricol, los trabajadores nuevos buscando justicia laboral y con las leyes a su favor, exigieron en el pliego de peticiones la aplicación de la convención a todos los trabajadores de las cinco empresas; y como empresarios y gobierno los desconocieron tuvieron que acudir al derecho legal y político de la huelga para que reconocieran al Sindicato y a la nueva seccional de La Estrella. Ni la empresa ni nadie creía que estos trabajadores durarían 24 días en huelga, al cabo de los cuales lograron el reconocimiento de Sintravidricol y de su nueva seccional; además la sindicalización de los trabajadores nuevos. Aunque no se logró la aplicación de las mismas normas convencionales para todos los trabajadores de las cinco empresas, se dio un paso importante, aunque polémico dentro del Sindicato, al generar en la misma convención un capitulo con normas menos favorables para los nuevos.

La Ross contraataca

Cuando se venía la negociación del 2012, comenta Andrés: “inesperadamente el Grupo Ross pidió adelantar la negociación con el argumento de que venía un gran negocio con un cliente brasilero y no quería que el conflicto y una posible huelga perjudicaran a la empresa, la que además alegaba crisis y necesidad de reducir la planta de trabajadores; el Sindicato aceptó adelantar la negociación. Pero en medio de esta la empresa utilizó la treta de saturar de trabajo una de las plantas y vaciar la otra con el fin de justificar el despido de 60 trabajadores, para lo cual pidió permiso al Ministerio de Trabajo. Se trenzó un nuevo conflicto de gran magnitud en el que el Sindicato derrotó legalmente la solicitud de despido masivo, pero la empresa chantajeó con dinero a casi 30 trabajadores y los hizo renunciar. Al final se hizo evidente que lo del negocio con Brasil era mentira”.

Esta convención, informan los sindicalistas, de todas maneras se firmó con una nueva vigencia a cuatro años (2011-2015), con fecha de vencimiento noviembre 20 de 2015. Pero se logró tumbar los cinco pactos colectivos y extender la convención a todos los trabajadores. El 31 de diciembre de 2012, sin mayores explicaciones el grupo Ross decide concentrar nuevamente las cinco empresas en solo dos: Moldes Medellín y Andes Cast Metals Foundry, las que siguen funcionando en Sabaneta y La Estrella. La discriminación laboral se siguió presentando.

La lucha continúa

En noviembre de 2015, los 270 trabajadores de la Ross Mould iniciaron una nueva búsqueda: la de igualar las garantías laborales a todos los empleados, pues, según los sindicalistas, a la fecha los de Moldes Medellín no gozan de auxilio de transporte, algunos no tienen restaurante y carecen de ayudas para la educación.

Pero el representante legal de la empresa, Daniel Posada Duque no ha visto bien esta iniciativa, por el contrario desarrolló una estrategia para dilatar el proceso de negociación, contratando a la firma de abogados externa Godoy-Córdoba; otra, para desprestigiar al Sindicato y dividir a los trabajadores, reuniéndolos en un restaurante y prometiéndoles cosas muy distintas a las que se discutían en la mesa con los abogados; así que los sindicalistas  tuvieron que salir a aclarar lo dicho por el representante legal de Ross, quien además tildaba a los sindicalizados como ilegales.

Pero de nada sirvieron las tretas. Como no hubo acuerdo en las etapas legales, los trabajadores votaron mayoritariamente la huelga el 15 de noviembre. El 23 del mismo mes, el Ministerio de Trabajo selló las puertas, no sin antes soportar un show del señor Daniel Posada, que según los líderes sindicales provocó la llegada del Gaula, porque supuestamente lo habían secuestrado al interior de su propia empresa; lo real como pudo confirmarlo el funcionario del Ministerio de Trabajo y la Policía, era que el señor Posada no quería salir de las instalaciones y así impedir los procedimientos legales.

Hoy los trabajadores llevan más de 66 días en huelga, entre otras cosas, gracias a su importante decisión económica y política de constituir un fondo prohuelga en el año 2001, al cual le aportan el 25% de la cuota sindical que es del 2% de su salario. Este fondo ahora tiene, aproximadamente 1.200 millones de pesos. Su moral esta alta, hay motivación y respaldo al Sindicato a tal punto que se han vinculado nuevos trabajadores y sus familiares. Las carpas de la huelga se han convertido en escuelas y espacios abiertos al público, con programación educativa y cultural, que fortalecen los lazos afectivos entre los trabajadores, sus familias y el movimiento social.

No se sabe en qué va a terminar este conflicto, porque la empresa ni siquiera ha tenido en cuenta los requerimientos del Sindicato, en especial no cede a extender los derechos a todos los trabajadores, por el contrario quiere desmejorar los adquiridos en materia de libertad sindical. Como es obvio, después de la exitosa huelga los trabajadores no darán su brazo a torcer.

viernes, 22 de enero de 2016

EDITORIAL 113: Acabar con el desarrollo y construir el Buen Vivir

El siete de agosto de 1990, en su discurso de posesión el ex presidente de Colombia, líder del nuevo liberalismo, Cesar Gaviria Trujillo anunciaba, como si fuera un acto heroico, que “… el tema de la privatización, tiene importancia en nuestro medio en lo que hace relación con algunos servicios ferroviarios y portuarios, en el sector financiero, en algunas empresas industriales y comerciales del estado y en el sector de las Telecomunicaciones, que no se puede seguir desarrollando como un poderoso monopolio estatal…”. También condenó las relaciones obrero patronales (y al sindicalismo) como un obstáculo para la llegada de inversión extranjera y para la competitividad del empresariado colombiano.

Para remover del camino los obstáculos odiosos, entre ellos al sindicalismo beligerante que impedía el desarrollo y mantenía unas relaciones obrero patronales muy costosas para el empresariado, se necesitaba una reforma laboral, y para eso estaba un jovencito “brillante”, de apellido Uribe Vélez, también liberal, que por esos años se estrenaba como senador y proyectó la más agresiva reforma laboral que se haya aprobado en Colombia, la ley 50 de 1990, que dejó a los trabajadores sin cesantías, sin estabilidad, entre otros aspectos; y sentenció la muerte del sindicalismo y los derechos laborales y sociales adquiridos, todo en favor de las grandes empresas nacionales y extranjeras. Acabábamos de recibir la bienvenida al futuro, según Gaviria.

 
Después de eso vino la debacle en nombre del desarrollo neoliberal, porque este ya había tocado nuestras puertas después de la segunda guerra mundial, destinando a este país en “vía de desarrollo” el vergonzoso papel de proveedor de materias primas, por orden, así le suene muy mamerto a la derecha, del imperialismo norteamericano, que después se expuso en unos documentos “secretos” llamados Santa Fé I y II, cómo, cuándo y dónde debíamos comportarnos y a quién le debíamos recibir órdenes en todos los aspectos: militares, sociales, económicos y políticos. Luego, el mismo joven “brillante” proyectó la reforma pensional y de seguridad social, ley 100 de 1993, y nos mandó a todos a regalarle la plata al sector financiero privado. Desde entonces cantamos a los cuatro vientos que esa platica se la iban a robar y nadie lo creyó; hoy los Palacinos y los Saludcoop, nos dan la razón.

La mayoría de privatizadores que se rasgan las vestiduras por la entrega de Isagen, fueron los mismos que jugaron en los años noventa un papel inquisidor y depredador contra las empresas estatales y los trabajadores; el caso más emblemático es el de Telecom, la empresa de telecomunicaciones más avanzada de Latinoamérica y que junto con Ecopetrol generaban superávit a los colombianos. Esta empresa fue deliberada y cínicamente marchitada por una caterva de tecnócratas, elementos de seguridad del Estado, medios masivos de comunicación, paramilitares, juristas, fiscales, economistas, etc., conducidos por el Estado. Fueron llevados a prisión a mediados del año 1992,  13 trabajadores y técnicos de Telecom, acusados de terrorismo, por defender el carácter público de la estatal de comunicaciones. También fueron torturados y asesinados los técnicos Joaquín María Caicedo, Islem de Jesús Quintero, Orlando Frías Parada y el abogado defensor de los sindicalistas, el ilustre Eduardo Umaña Mendoza.

De todas maneras, de nada sirvió la digna lucha de los trabajadores estatales, porque cuando el joven “brillante” llegó a la presidencia de la república en el 2002, una de sus grandes tareas fue la de liquidar Telecom, entregársela a las transnacionales privadas con todo e infraestructura y despedir a sus 10.000 trabajadores. Muchos que no se percataron de la noticia llegaron como todos los días a laborar y no pudieron hacerlo porque el ejército se los impidió. Así obró el mismo que hoy se opone a la entrega de Isagen y que en 2007 privatizó el 19% de acciones que tenía la nación allí, y en 2008 a través de su ministro de hacienda Oscar Iván Zuluaga la ferió en 3.2 billones. Pero no la pudo vender.

Y Pastrana también la ofreció, y le sacó plata para pagar otras deudas en 1999 y la dejó al borde de la quiebra. Todos los presidentes y toda la oligarquía nacional están postrados a los designios del capital financiero transnacional, y seguirán estándolo con Vargas Lleras en el 2018. Todos seguirán vendiéndonos la idea de modelo desarrollista, haciéndonos creer que por el camino de la modernidad, de la infraestructura, de las reformas capitalistas llegaremos al desarrollo. Y a pesar de más de un siglo de lo mismo aún hay ingenuos que lo creen.

La vía al desarrollo solo existe para los países ricos que se pueden desarrollar gracias a las materias primas que nos extraen, y por eso como lo dice el economista Alberto Acosta en sus documentos sobre este tema, nosotros tenemos la maldición de la abundancia, porque no hay un solo país que gracias a sus reservas de recursos naturales haya dado ese paso. Todo lo contrario, los ejemplos abundan y todo un continente como el africano paga con sudor, hambre y sangre esa maldición; y América Latina también.

Y lo que viene sucediendo al ciclo democratizador en América latina tiene mucho o todo que ver con el modelo desarrollista, porque es muy difícil gobernar con ropa prestada. De nada sirve alcanzar el gobierno si no se puede aplicar un nuevo modelo propio, que abra camino separado del desarrollo y en especial que empiece a cambiar la lógica de subsidiar a su pueblo, montado en el lomo del toro del extractivismo, un toro que destruye el planeta y deja todos los escombros para que los recojan los heridos. Eso le sucede a Venezuela, a Ecuador y a Bolivia principalmente. Y por eso a los colombianos de nada nos ha servido tener mucha agua y electricidad y tener que pagarla costosa; o tener Carbón y no tener energía térmica, y tener petróleo y pagar la gasolina más cara del mundo.

En Colombia, Santos mostró los dientes y con la suficiencia de quien se siente ganador ha dicho a boca llena que la paz es el mejor negocio. ¡Eso, negocio! porque necesita a las insurgencias sin armas y fuera de los territorios que tienen los recursos energéticos. O sea, necesita un país sin guerrillas y sin protesta social para echar a andar el PND y los cientos de megaproyectos que se ciernen sobre el territorio nacional. La venta de Isagen es la cuota inicial, que solo le aportará 6.48 billones a las vías 4G; una bicoca porque toda la propuesta cuesta 50 billones al Estado, o sea a nosotros. Y por eso se privatizará Ecopetrol y se privatizará todo, como dijo Saramago, hasta la puta que los parió.

Ya no basta salir a movilizarnos, además hay que salir a rechazar el modelo económico y el desarrollismo que nos mata. No basta con el gran paro nacional que se planea para mediados de año y al que deberíamos salir todos y todas, pero sin manoseos de la derecha entreguista y cínica. Hay que unirnos, toda la clase popular como decía Camilo Torres; protestar y construir la propuesta social y política, la del buen vivir, aquella en donde la productividad, el consumo insaciable y el crecimiento o desarrollo económico no sean los que señalen el éxito; una propuesta que enamore a un pueblo, que eduque a las nuevas generaciones en la convivencia pacífica, en el respeto por la vida y la diversidad, también por el planeta, pero sacudido de la influencia bipartidista liberal - conservadora de la oligarquía asesina, egoísta y entreguista que nos ha gobernado por más de dos siglos.



jueves, 21 de enero de 2016

Leonela Relys enseñó que ‘Yo, sí puedo’

En el año 1961, cuando Cuba inició su Campaña Nacional de Alfabetización, Leonela Relys tenía apenas 13 años. Vivía con sus abuelos, y decidió vincularse de manera voluntaria en la campaña pues su sueño, desde muy pequeña, era ser maestra; y aunque apenas contaba con sexto grado de alfabetización, sabía leer y escribir correctamente.  Desde este momento, inició para ella un proceso extraordinario de educación como práctica liberadora. 

Durante la campaña de alfabetización, los voluntarios debían vivir en las casas de los campesinos que iban a alfabetizar. Allí aprendió las labores del campo y comprendió que el mundo era más grande de lo que ella pensaba. Esto creó en ella la convicción de estudiar para ingresar al magisterio, y gracias a un plan de becas de estudios para los brigadistas que Cuba ofreció tras el éxito de la campaña, que logró reducir al 3,9% el analfabetismo en Cuba, se hizo maestra de primaria.

Su primera experiencia en un aula de clases fue con mujeres que habían sido empleadas domésticas antes de la revolución. Posteriormente, fue seleccionada junto con otros 20 estudiantes militantes de la UJC (Unión de Jóvenes Comunistas), para trabajar en la Escuela de Suelos y Fertilizantes “Sierra Maestra”, donde conoció directamente a Fidel Castro. Luego, mientras estudiaba en la Universidad, trabajó en la escuela formadora de maestros primarios Makarenco, y finalmente, se graduó de la carrera profesoral de español y literatura. Y así, tras la visita de una asesora del Ministerio de Educación, se convirtió en metodóloga inspectora para un curso de maestros que iban a pasar a la universidad, siendo este su primer acercamiento a la pedagogía.

En adelante, acompañó misiones internacionalistas en Haití, Sudáfrica y otros países, y lideró programas de alfabetización por radio. En una de estas, cuando regresaba de Sudáfrica en 2001, Fidel le encargó en un acto público la labor de diseñar una campaña de alfabetización masiva para televisión. Volvió a Haití con esta terea encomendada, y desde allí le envío a Fidel una primera propuesta. A su regreso, comenzó a diseñar lo que se convirtió en el ‘Yo, sí puedo’, el programa de alfabetización para adultos por televisión, que Cuba hizo famoso en el mundo.

Así, se creó un equipo multidisciplinario, y nació el programa con un carácter universalista y latinoamericanista, que luego se contextualizaría en español, inglés, francés, y otros idiomas originarios para 30 países del mundo como Venezuela, Brasil, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Panamá, República Dominicana, Guinea Bissau, Colombia, entre otros. Esto porque, aunque el programa mantenía la misma estructura, debía acercarse a la idiosincrasia e identidad de cada pueblo.

Leonela siguió estudiando, en el 2007 se hizo doctora en ciencias pedagógicas. Tuvo dos hijos y tres nietos; sus últimos años los pasó entre el trabajo, el estudio y su familia. En enero 17 del 2015, Leonela falleció. Fue mujer revolucionaria, y ejemplo vivo de que la educación es la única manera de ser libres. Por eso será difícil que muera en el recuerdo de su pueblo.