Artículo publicado en la Edición impresa 113 (enero - febrero 2016) de Periferia Prensa Alternativa
Por Jazmin Grajales
Clavijo
El
Alto Baudó está ubicado en el departamento del Chocó, en el Valle del Río
Baudó. Pié de Pato es su cabecera municipal, la población afro suma el 73.33% y
la indígena el 26.67%, por lo que es denominado por las mismas comunidades como
un territorio interétnico. Esta zona de la Serranía del Baudó (Alto Baudó), por
cumplir con criterios de ecosistemas en estado de conservación, su diversidad,
su riqueza en las fuentes hídricas y resguardo de fauna, ha sido definida como
“área específica de interés para la conservación de la biodiversidad”.
Pero
pese a ser un territorio rico en sus recursos naturales, biodiverso,
interétnico y cultural, Chocó es una zona con menor desarrollo económico, con
altos índices de pobreza, miseria y desempleo. Particularmente, según informes
oficiales de la alcaldía de Alto baudò, el municipio tiene uno de los mayores índices de
Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), y tiene los ingresos económicos más
bajos en su población.
Crisis
económica y social en el Alto Baudó
Por su parte, los Consejos
Comunitarios Afro y los Cabildos Indígenas manifiestan que “con la llegada de
los megaproyectos de explotación minera se rompió la armonía entre las
comunidades y sus tradiciones; con la explotación de los recursos naturales,
también llegaron los desplazamientos de las comunidades, la contaminación, el
aumento del pie de fuerza militar, la proliferación de grupos paramilitares y
por ende la vulneración de todo tipo de derechos de las personas, siendo este
departamento el líder en pobreza a nivel nacional”. Señalan que “las políticas
estatales van encaminadas al favorecimiento del gran capital transnacional, impuestas
por el Fondo Monetario Internacional –FMI- y el Banco Mundial –BM- e implementadas
en el Plan Colombia como estrategia de exterminio y despojo de las comunidades
étnicas, a través de las fumigaciones aéreas indiscriminadas con glifosato que
causan daños irreversibles en la naturaleza y la salud humana, violando el Derecho
Internacional Humanitario pese que el Consejo Nacional de Estado ordeno la
suspensión de las aspersiones con glifosato”.
Denuncian las comunidades que carecen
del acceso a la salud, la educación, la vivienda, la recreación y el deporte,
la alimentación, y viven en medio de la corrupción político-administrativa. Por
ello se están organizando, para exigir y buscar soluciones frente a las
necesidades que en el territorio se viven.
Movilización social y
amenazas
En
la edición 111 de Periferia se publicaron las conclusiones de la Asamblea
Interétnica Regional realizada por las comunidades indígenas y afros en Puerto
Echeverri, en la que mandataron la realización de una Minga Interétnica, que llevaron
a cabo el pasado mes de noviembre en la cabecera municipal de Pié de Pato, y
cuyas razones expone un líder de la comunidad afro: “la minga que nos
proponemos es de carácter pacífica, y queremos visibilizar la problemática que
viven a diario las comunidades Alto Baudoseñas
víctimas de
la corrupción y el abandono estatal,
por la falta de calidad de vida,
infraestructura, saneamiento básico, salud y educación,
entre otros, ya que han transcurrido los años y con ellos varias
administraciones que no resuelven ningún problema y se roban los bienes,
recursos y dinero público”.
Previo
a la Minga Interétnica, líderes de Chachajo, Santa Rita, Pié de Pato, Puerto
Alegre, Puerto Echaverri, Cugucho, denunciaron las amenazas que recibieron vía
telefónica desde octubre por parte de grupos paramilitares, con expresiones
como: “Si hacen la toma les descargamos una
nueve milímetros en la cabeza”, “si participan de la minga son hombres
muertos”, “los vamos a matar a ustedes y sus familias”. El 17 de noviembre
cuando la comunidad transportaba alimentos por el río hacia Pié de Pato con el
fin de garantizar la Minga Interétnica, estos fueron incautados por
desconocidos.
Por su parte uno de los líderes amenazados cuenta que el
alcalde saliente Fredy Palacio Ramírez y a quien además se le atribuye
irregularidades en el manejo de recursos públicos, “ha advertido a la comunidad
llamándolos y diciendo que no participaran de la Minga porque los “paracos” los
iban a matar”.
Tras 10 días de la Minga Interétnica, y luego de declararse en Minga Indefinida por
incumplimientos del gobierno municipal y departamental, el pasado 02 de
diciembre, los participantes fueron agredidos físicamente por el Escuadrón Móvil
Antidisturbios – ESMAD –, según cuenta un líder. Tras esta violenta agresión
resultaron heridos 8 indígenas en el rostro y la cabeza, reportándose un caso
de gravedad por heridas de profundidad en la boca; la agresión se dio sin
importar que en el lugar se encontraban 10 mujeres en embarazo y 12 niñas y
niños menores de 8 años.
Mesas temáticas por
la vida y el territorio
Después
de las denuncias realizadas por estos hechos, se llevó a cabo una reunión donde
el objetivo propuesto fue “iniciar el proceso de concertación entre la Minga
Interétnica y las entidades Municipales del Alto Baudó y Autoridades del
Departamentales del Chocó”. Ariel Salazar Sarco, líder indígena de la Minga
Interetnica manifiesta que “la población ha desarrollado
continuas jornadas para reivindicar sus derechos y mejorar sus condiciones de
vida, situación que no ha generado mayor impacto debido a la falta de voluntad
política por parte de los gobernantes locales, regionales y nacionales, que
siempre hacen caso omiso a las exigencias y necesidades de sus comunidades. Quienes
habitamos esta región del país gozamos de una protección especial amparada en
la ley 70 del 93 y en la ley 89 del 90
de la Constitución Política de Colombia, donde se reconoce la autonomía y el
gobierno propio de las comunidades étnicas, el derecho a la consulta previa,
libre e informada, a la titulación de sus territorios y se obliga al Estado a
invertir socialmente para la
superación NBI, de acuerdo a los planes
de vida y las realidades concretas de sus territorios. Podemos observar en un
contexto real que el Estado se ha negado a cumplir lo establecido en la ley y
contrario a esto encontramos un territorio usurpado, marginado y empobrecido”.
Tanto
la Minga como la institucionalidad evidencian la necesidad de un espacio de
diálogo para analizar el pliego de peticiones realizado en la Minga
Interétnica, por lo cual, del 22 al 25 de febrero de 2016, se instalarán en Píe
de Pato ocho mesas temáticas de trabajo conjunto: salud, educación, saneamiento
básico, vivienda digna, infraestructura, medio ambiente y territorio, derechos
humanos y derecho internacional humanitario y soberanía alimentaria. Patrón,
líder afro resalta que: “El proceso continúa; estamos a la espera de la
instalación de las mesas temáticas como un espacio de diálogo, esperamos
participar de ellas por la vida, el territorio y
el bienestar del Alto Baudó”.
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