Inician Jornadas de Indignación Campesina en Bogotá

Bogotá, 31 de agosto de 2015

Inician en la capital colombiana las Jornadas de Indignación por incumplimientos del Gobierno Nacional con los pactos acordados durante el paro agrario del año 2013, así como en rechazo al Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018 aprobado recientemente, que desde la perspectiva de los movilizados, empeora el bienestar de los colombianos y afecta el campo ambiental y económicamente. A esto se suma que el ambiente social se contamina por la persecución política y sistemática de líderes y lideresas sociales, según lo han manifestado y denunciado.

La instalación contó con la presencia de integrantes del Congreso de los Pueblos, Marcha Patriótica, el Coordinador Nacional Agrario -CNA-, el Movimiento Político de Masas Social y Popular de Centro Oriente,  la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina -ANZORC-, la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria - FENSUAGRO-, la Organización Nacional Indígena de Colombia -ONIC-, la Asociación Indígena de Colombia -AICO POR LA PACHA MAMA-, la Coalición de Movimientos Sociales de Colombia - COMOSOC- entre otras expresiones campesinas, indígenas, afrodescendientes y urbanas. También hicieron presencia el senador Alberto  Castilla, el concejal Juvenal Arrieta, Fernando Arias, entre otros reconocidos líderes. De esta manera, el Coliseo Cubierto El Campín se llenó de razones para la indignación del Movimiento Social y Popular colombiano.

En primera instancia, los diferentes movimientos reunidos manifestaron sus motivos para levantarse en Jornada de Indignación. Muchos denunciaron, entre otras cosas, que la paz que propone el Gobierno no es la del pueblo colombiano, que las agresiones de la fuerza estatal no son coherentes con el discurso de la paz, que los fondos destinados para las regiones en el Plan Nacional de Desarrollo no satisfacen las necesidades de las mismas. Anunciaron, por tal motivo, movilizaciones para el resto de la semana que pretenden visibilizar las problemáticas, fortalecer lazos de solidaridad en el Movimiento y presionar por el cumplimiento de los acuerdos por parte del estamento gubernamental.